Por Mónica Delgado
El crudo mexicano de exportación se ubicó el 1 de abril en 97.25 dólares por barril, su nivel más bajo desde el 16 de marzo pasado, lo que representa una disminución respecto al cierre de la semana anterior de 12.35 por ciento, es decir, 13.70 dólares por tonel menos.
En lo que va de 2022, la mezcla mexicana ha registrado un aumento acumulado de 36.41 por ciento o 25.96 dólares por barril más y un nivel promedio de 90.70 dólares por tonel, 36.50 unidades por arriba de lo previsto en la Ley de Ingresos para 2022 (de 55.10 dólares por barril), 64.61 por ciento más.
A nivel global, del 28 de marzo al 1 de abril, los precios de los contratos a futuro de los crudos West Texas Intermediate (WTI) y Brent reportaron un comportamiento a la baja, debido a los nuevos cierres en China para frenar la propagación del coronavirus, lo que elevó el temor de que la demanda de combustibles pueda disminuir.
Se sumó la aprobación de Joe Biden, presidente de Estados Unidos, de liberar de la Reserva Estratégica de Petróleo estadounidense 180 millones de barriles, un movimiento sin precedentes con el que el mandatario desea combatir la inflación.
Incidió también el anuncio de los países miembros de la Agencia Internacional de Energía (AIE) de una liberación adicional de volumen de petróleo desde sus reservas estratégicas, cuyos detalles darán a conocer la próxima semana.
Así, el precio del WTI para mayo y del Brent para junio de 2022 mostraron un descenso durante la semana, de 12.84 por ciento o 14.63 dólares por barril menos y de 11.06 por ciento o 12.98 dólares por tonel, respectivamente, al cerrar el 1 de abril pasado en 99.27 dólares por barril el WTI y en 104.39 dólares por tonel el Brent, sus menores niveles en dos semanas.