La actriz tuvo mucho que ver en la transición de la Ciudad de México y uno de los logros que pudo ofrecerle a la ciudadanía fue el Metro ya que fue la carta de amor que le brindó su esposo Alex Berger
Redacción
María Félix era una mujer que a pesar de haber triunfado en el cine y de ser reconocida a nivel mundial siempre reflejó el amor que le tenía a México y uno de los regalos que le dio a la ciudadanía fue el Metro de la Ciudad que nació del amor.
Alexander Berger y La doña estuvieron casados durante 18 años, siendo este la pareja con quien más tiempo duró.
El banquero francés y la actriz se conocieron en una fiesta de la Embajada de Francia, en México. Agustín Lara fue invitado, razón por la cual asistió María Félix, pero con la muerte del Flaco de Oro hizo que la actriz se encontrara en un bar de Francia y así iniciaron su amor.
El 22 de diciembre de 1956 contrajeron nupcias y en varias entrevistas la actriz mencionó que Alexander no fue el hombre que más amó, pero sí al que mejor amo.
Aunque uno de los regalos que nació de este gran amor que tuvieron estos dos fue la creación del Metro, ya que Berger fue partícipe de las tres primeras líneas del Metro.
En una entrevista María Félix menciona que “si no me lo quieren creer nada va a cambiar entre nosotros, pero el maravilloso Metro que tiene la Ciudad de México es Mío. Me lo regaló mi marido. La primera idea de hacer el Metro de México fue de Alex Berger, mi marido”.
La actriz de Tizoc hacía referencia que la Ciudad de México, para ser la capital de un país cosmopolita, necesitaba un Metro. Esta idea surgió en la presidencia de Adolfo López Mateos, pero el alto costo y la materia prima fue la razón por la que se pospuso hasta el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz.
Pero Alex cuando prometía, cumplía. María Félix
Alexander Berger fue el intermediario entre Francia y México ya que este banquero pidió un crédito y con la ayuda de la influencia de su esposa, que estuvo tan involucrada en el proyecto, que ella misma prestó su casa de Polanco, Hegel 610, para la planeación.
El matrimonio duró de 1956 a 1974 y la construcción del transporte fue una carta de amor, además de que María tenía la necesidad de ver a su país con los progresos que se realizaban en el mundo.
Sin embargo, al banquero le diagnosticaron cáncer pulmonar avanzado, esto hizo que la actriz decayera y durante la Noche Vieja de 1974, Berger falleció. La actriz decidió hacerle una misa de cuerpo presente en la Catedral de París.
En el 2014, José Alfonso Suárez quien era el subsecretario del Sistema de Transporte Colectivo, recordó que La Doña tuvo una gran influencia en este proyecto capitalino.
En una conferencia de prensa mencionó que “en efecto, el señor Berger, participó en el proceso de construcción de las primeras tres líneas. En efecto, en casa de María Félix se llevaron reuniones de trabajo entre el ingeniero Bernardo Quintana, el abuelo del actual presidente de ICA, junto con el gerente Corona del Rosal”.
María Félix y su opinión en el Centro Histórico
En una entrevista con Jacobo Zabludovsky y Verónica Castro mencionó que el Centro histórico de la Ciudad de México “está hecho una porquería. Está hecho un cajón de la basura”.
“El Centro histórico que el gran terremoto del 85 respetó. Nosotros los mexicanos no respetamos”, mencionó María Félix.
También mencionaba que ella ama a su país y ha querido “representarlo dignamente en el exterior”.
“Amo su paisaje de pasión, su historia cruel, luminosa, pero sobre todo a su gente. El pueblo mexicano tiene problemas, no hay duda, pero los supera porque tiene alma, porque tiene genio”. Yo, lo he amado siempre mi dicha mayor es confirmar que a través de los tiempos y las distancias, entre el público de México y yo existe una historia de amor”, afirmó.