La obesidad en mujeres es responsable de acelerar la muerte de las células sanas y promover el desarrollo de células cancerosas, por lo que siete de cada 10 mujeres con más de 85 centímetros de cintura, están en riesgo de tener tumores malignos, destacó la doctora Patricia Loranca Moreno, profesora e investigadora del Hospital 1° de Octubre del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2020 sobre Covid-19, 40.2% de las mujeres adultas en México tienen obesidad, y 35.8% tienen sobrepeso. Durante las sesiones médicas organizadas por medix® con motivo del Día Mundial de la Obesidad, la especialista en ginecología y obstetricia, agregó que las mujeres con obesidad tienen mayor posibilidad de tener diabetes, enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares, hígado graso, así como daño en los huesos y articulaciones.
Loranca Moreno detalló que la obesidad causa hasta 30% de los casos de infertilidad, favorece la aparición de várices, reflujo gastroesofágico, dificultad para respirar mientras duermen y deficiencia de vitamina D, esta última, vital para evitar o hacer más lento el desarrollo de células cancerosas.
“Las mujeres con más de 85 centímetros de cintura van a tener un secuestro masivo de vitamina D y esto quiere decir que las pacientes con obesidad central (en el abdomen) y, sobre todo visceral, van a tener mayor riesgo de padecer enfermedades crónico degenerativas y cáncer por la deficiencia de esta vitamina que ayuda a mantener las células en buen estado”, precisó la especialista.
Por su parte, la nutrióloga por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Yesica Avellaneda Martínez, mencionó que la mayoría de las pacientes con obesidad necesitan dosis más altas de vitamina D, de hasta 4,000 unidades, para atender la deficiencia que provoca el tejido graso y evitar mayores riesgos a su salud.
En las pláticas con los médicos, Rafael Violante, investigador y catedrático de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Tampico, dijo que el gran reto es redefinir la obesidad como una enfermedad crónica, ya que solamente 5% de los pacientes se quedan en un tratamiento más de 12 meses, lo que dificulta su recuperación y los lleva a constantes recaídas.
Ante este panorama, el doctor Francisco J. Tinahones, jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Universitario Virgen de la Victoria, de la Universidad de Málaga, España, expuso que es necesario individualizar los tratamientos y proponer una terapia farmacológica a pacientes con sobrepeso y comorbilidades como diabetes e hipertensión y a quienes tienen obesidad.
Por su parte, el médico internista y catedrático de la Universidad del Valle de México en Veracruz, Alejandro Barrat Hernández, coincidió en que la farmacoterapia está bien indicada en muchos casos y es necesario que los médicos pierdan el miedo a prescribir algunas de las opciones que se tienen disponibles en México.
Los expertos coincidieron en que la obesidad es una enfermedad que poco se reconoce como tal por parte de los pacientes e incluso por los profesionales de la salud, por eso las pláticas organizadas por medix® tienen como propósito dar herramientas a la comunidad médica sobre el abordaje de este problema de salud que requiere atención integral y multidisciplinaria, con médicos generales y especialistas.